El territorio semántico del término «calidad» se ha recorrido múltiples veces desde distintas perspectivas e intenciones y en contextos discursivos diferentes. Hay discursos que lo utilizan para legitimar ideas y acciones de carácter directamente político; hay otros que, aunque también son políticos, contienen referencias técnicas como los producidos por organismos internacionales y nacionales que tratan de analizar y prever las necesidades de los sistemas educativos para los nuevos tiempos y orientar a las administraciones educativas y los gobiernos para acometer reformas; y están los discursos que surgen de las investigaciones educativas y de la opinión de los expertos, que se presentan bajo el paraguas de la ciencia, adquiriendo con ello la legitimidad propia de los discursos científicos, aunque se presenten como hipótesis provisionales sujetas a revisión.